“Archivo de memoria externa. Extensión y resignificación de la memoria ordinaria”.
Encuentro de sociología ordinaria. Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, 2024. (Enlace)
“Archivo de memoria externa. Extensión y resignificación de la memoria ordinaria”.
Encuentro de sociología ordinaria. Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, 2024. (Enlace)
El Archivo de Memorias Externas es un trabajo artístico de investigación y arte relacional basado en la reconstrucción y reimaginación de la memoria digital de las personas migrantes, que lleva en activo desde el 2021. Su objetivo es facilitar la preservación de la memoria digital de los desplazados que cae en el olvido, que los migrantes tienden a perder o borrar debido a la ausencia de un lugar donde preservar esta información. La inaccesibilidad a los medios de almacenamiento tradicionales o a un ordenador dificulta la conservación de esta memoria y tiende a perderse. El derecho a la memoria, a almacenarla y preservarla continúa siendo un privilegio. Mediante estos archivos de experiencias se indaga en esta relación con nuevas formas de gestionar y almacenar los recuerdos, las memorias, los álbumes personales y familiares
A lo largo del año recopilo tarjetas de memoria, discos duros y SD, a partir de éstas construyo relatos imaginativos basados en la autorrepresentación de migrantes. Los archivos rescatados y restaurados me permiten viajar a través de sus recuerdos, explorando distintos espacios. Indago en sus historias entre las paredes de estos archivos, reinterpretándolas y reconstruyendo sus visiones del mundo a través de pistas encontradas. Mediante imágenes, videos y registros cotidianos, reimagino sus experiencias migratorias y las conecto con mi propio imaginario cotidiano.
Experiencias consideradas ordinarias, que muchas veces desecharíamos para ahorrar espacio de memoria en nuestros dispositivos, son material de gran interés para mí. Fotografías realizadas por error a una parte del cuerpo, a un rincón de la casa, o a algo inusual son sugerentes para integrarse en esos vínculos y reconstruir una memoria colectiva, un archivo colectivo de memoria cotidiana.
Esta metodología parte de una arqueología digital del archivo, mediante sus metadatos, obtengo la información de la fecha, el tiempo y el espacio cuando esta se ha realizado. Encuentro archivos de más de una década, archivos que han estado sepultados y olvidados durante más de 20 años. Que han estado desapareciendo lentamente dentro de los parámetros de vida de su franja etaria. Entre la distancia que separa España y Marruecos he ido recopilando discos de memoria externa en busca de experiencias auténticas de las vidas migrantes y trabajar desde su autorrepresentación. En este proyecto he logrado transmitir estas experiencias desde sus propios cuerpos. Quizá muchos no sepan quién soy, ni tampoco sepan que sus memorias siguen vivas en alguna parte de la Tierra, tal vez ni reconozcan ese recuerdo que sigue vivo. Dentro del manejo ético y moral de estas pertenencias, concibo este trabajo de arqueología digital no como un proceso de reconstrucción del pasado o las historias sino de las emociones, de las cotidianidades, de las inquietudes y de los pensamientos subjetivos concretos que buscan trasladar y elevar el registro de sus experiencias.